El cuerpo y la cara de la mujer cambian radicalmente después de que pierde más de 77 kilos
Luego de que Kaylee Bonnet se sometió a una drástica bajada de peso, su rostro cambió increíblemente.
Esta mujer de California se dio cuenta de que pesando todo lo que pesaba, no estaba viviendo su vida al máximo. Así que luego de llegar a los 218 kilogramos de peso, y con la recomendación del médico, decidió empezar a cuidar de su salud.
De acuerdo a lo informado por Cosmopolitan, Kaylee, de 25 años, sufrió de sobrepeso desde que tiene memoria: en la escuela secundaria, pesaba 140 kg. Se burlaban de ella y casi no tenía amigos.
"Día a día, vivir era una lucha constante", dice ella. "De preocuparme sobre si cabré en la silla o si la silla me aguantará, a intentar verme bonita y esperar que llegar del punto A al punto B no me haga sudarme el pelo y perder el maquillaje, siempre estaba a la defensiva", explicó a Cosmopolitan.
Cuando llegó a los 20 años, Kaylee era pre-diabética y tenía presión arterial alta. Sus doctores ya le habían advertido que sufriría un ataque cardíaco o un derrame cerebral si no hacía algo con respecto a su peso.
"No quería morir", dice ella, pero Kaylee sabía que tenía que hacer algunos cambios para evitar eso: "No tienes que pasar por la vida pesando 200 kg”, explicó.
Entonces ella decidió someterse a una cirugía de derivación gástrica. Sin embargo, antes del procedimiento, su cirujano le dio algunas tareas: ella tendría que perder de 13 a 18 kg.
Decidida a tener éxito, Kaylee redujo drásticamente las calorías, siguió una dieta alta en proteínas y baja en carbohidratos, y comenzó a caminar cada día.
Cuando llegó el día de la cirugía en octubre de 2016, había perdido casi 35 kg en menos de cinco meses. Después, la chica hizo algunos cambios más importantes en su estilo de vida: eliminó los alimentos con alto contenido de grasa y las azúcares que consumía eran naturales.
Su ingesta diaria fue limitada a 800 calorías. También empezó a hacer Crossfit al menos tres veces a la semana. Para marzo de 2017, pesaba 78 kilos menos. No obstante, sabe que la lucha no ha terminado y más porque acaba de dar a luz a un hermoso bebé.
Por supuesto que la pérdida drástica de peso que atravesó cambió su cuerpo increíblemente. Sin embargo, nunca habría adivinado que su adelgazamiento afectaría su rostro de una manera tan drástica.
Gran parte de sus mejillas desaparecieron, y su mandíbula incluso está más definida. Su rostro ahora brilla, y a ella le encanta.
"La pérdida de peso realmente ha cambiado mi vida", dice ella. "De hecho, estoy viviendo la vida, algo que antes no estaba haciendo".