Hombre mantuvo altar de hijo fallecido por 12 años, y un día halló increíble tributo en el lugar

Durante una docena de años, alguien cuidó un monumento elaborado al borde de la carretera frente a la propiedad de una empresa en Richmond, California, que seguía siendo un misterio.

Un memorial meticulosamente cuidado con flores, estatuas de ángeles, luces solares y pequeños arbustos se extendía a lo largo de una valla en el borde de una estación propiedad de la compañía de energía Chevron, en el vecindario californiano de Hilltop. Nadie sabía quién estaba a cargo de su mantenimiento, hasta que ocurrió lo inevitable.

"Veíamos que se mantenía, pero nunca veíamos quién lo estaba manteniendo", dijo el ejecutivo de Chevron, Joe Lorenz, según reportó NBC News.

La compañía decidió dejar el monumento solo hasta el año pasado, cuando la propiedad necesitaba una remodelación. Entonces Chevron colocó un letrero en el lugar, pidiéndole al cuidador anónimo que llamara a sus oficinas.

Fue así como apareció Ray Olson, quien les informó que había creado el monumento en honor a su único hijo, que también se llamaba Raymond.

El joven Raymond Olson tenía solo 22 años cuando, en 2003, murió en un accidente que involucró a un conductor ebrio.

Su fiel padre atendía al monumento en medio de la noche para que nadie lo viera. Siempre temió que el tributo desapareciera algún día y supuso que eso sucedería cuando Chevron dejó la nota.

"Solo sabía que iban a derribarlo", dijo Olson, pero nunca predijo lo que sucedería.

Chevron se asoció con Cesar Zepeda, presidente del consejo vecinal, para construir un monumento permanente, con un banco y una placa con una foto del hijo de Olson en un parque cercano.

"Dijimos: 'Este es tu lugar, Ray. Ya no tienes que venir por la noche'", dijo Lorenz.

Con el nuevo monumento, Olson dijo que siente que finalmente puede aceptar la muerte de su hijo.

"Saber que le has dado la vida y la esperanza a un padre... y saber que estás mejorando la vida de alguien, es una sensación increíble y maravillosa", dijo Zepeda.

"Muestra que la gente todavía se preocupa", expresó Olson. "El mundo tiene esperanza".