Joven visita cárcel en excursión escolar y de repente reconoció a uno de los presos

El encuentro, que tuvo lugar en una prisión de Tailandia, conmovió a los usuarios de las redes sociales.

Un viaje de estudios a una prisión tailandesa se convirtió en una reunión desgarradora para un adolescente cuando reconoció a uno de los internos.

En un post de Facebook compartido el pasado 2 de septiembre por Arom Khunmoung, líder del equipo de Jam Banjeud Rayong, una organización que planea excursiones educativas y recreativas para empresas y escuelas, se muestra el encuentro entre quienes resultaron ser padre e hijo.

El encuentro conmovió a los usuarios de las redes sociales. En la leyenda del post dice que, durante la visita del grupo de estudiantes, Khunmoung notó que uno de los muchachos estaba “triste de pie y mirando a un prisionero” con lágrimas en los ojos.

Arom agregó: “Lo extraño para mí es que el prisionero también estaba mirándolo y llorando. Entonces fui a preguntarle al chico qué sucedía”.

“Maestro, ese es mi padre. Estoy muy conmocionado [de verlo]”, le dijo el adolescente a Arom Khunmoung.

Después de darse cuenta de que el chico quería hablar con su padre, el hombre preguntó si el guardia permitía que el par se reuniera brevemente, a lo cual accedió.

“Ambos se echaron a llorar”, describió Arom. Además dijo que los testigos también comenzaron a llorar mientras veían la escena desarrollarse.

El líder del equipo agregó: “El padre siguió besando al chico mientras murmuraba 'Lo siento tanto, te extraño, cuando salga de este lugar voy a ser una buena persona. Por favor, sé un buen chico, hijo’”.

Entonces, según la publicación, el padre le preguntó al hijo: “¿Estás avergonzado de mí? ¿Estás avergonzado de que tus amigos vean que estoy en prisión?”.

El joven respondió: “No, no me avergüenzo en absoluto”, dijo antes de arrodillarse para agacharse a los pies de su padre, un gesto tradicional de respeto tailandés.

Arom dijo que chico estaba “lleno de gratitud” por poder ver a su padre, cuyo crimen y sentencia no fueron revelados la publicación.

Añadió que tales viajes a la prisión eran un importante "estilo de enseñanza para las personas que aún tienen muchas libertades".

Esta historia nos recuerda un acontecimiento similar donde un padre finalmente encontró a su hijo tras estar perdido por 24 años, y después de imprimir y enviar 180.000 avisos de personas desaparecidas en China.

Li Shunji, el padre, y Du Li, la madre, perdieron a su hijo de tres años en las calles de la ciudad de Xi’am el 8 de agosto de 1994. En su encuentro, del que puedes tener más detalles aquí, se derramaron lágrimas de emoción y alivio.