Perrito abandonado a morir en jaula inmunda recibe nueva vida y luce irreconocible

La División de Crueldad a los Animales del Departamento de Policía de Austin, Texas, se encontró con un espectáculo horrible un día en noviembre de 2016.

Los oficiales recibieron una llamada informándoles sobre un perro muerto en una intersección concurrida cerca del centro de Austin. El animal fue dejado en una pequeña caja solo.

Según el Huffington Post, cuando llegaron los agentes, vieron al perro exactamente como se describe, además de estar cubiertos de heces.

El perro mostró emaciación severa, con sus costillas y huesos sobresaliendo de su sección media. Al mirar más de cerca, un oficial llamado Ewa Wagner creyó haber notado el movimiento de la caja torácica del perro.

"Nos dimos cuenta de que estaba viva, pero apenas, así que la llevamos al Austin Animal Center donde los veterinarios comenzaron el tratamiento de emergencia".

Y continuó: "Su temperatura era demasiado baja como para siquiera registrarla en un termómetro y no se movía en absoluto. No pensamos que hubiera alguna manera de sobrevivir".

En cualquier caso, la llamaban Sophie. El pobre perro tenía aproximadamente un año y pesaba 4.3 kilos.

La técnica veterinaria Elizabeth Mancera hizo todo lo posible por consolar al perro mientras yacía en su mesa de examen ese día:

"Hablé con ella todo el tiempo y, aunque no podía mover su cuerpo, me miró con ojos suplicantes. Le dije que estaría bien".

Mancera luego trabajó para elevar la temperatura de Sophie usando un secador de pelo en un ambiente cálido. Después de dos horas, finalmente su temperatura se elevó.

Esa misma noche, a Mancera se le permitió llevar a Sophie como una crianza temporal. Ella le dio cuidado las 24 horas.

Al no poder caminar ni ponerse de pie, Sophie comenzó a mostrar un cambio el día cuatro cuando se levantó. Estaba decidida y tenía a Mancera a su lado en cada paso del camino.

Semana a semana, Sophie se hizo más y más fuerte. Ella ahora tenía el apoyo de una familia amorosa detrás de ella. Su peso se triplicó desde la primera vez que la encontraron.

Mancera dijo que fue en Acción de Gracias que sabía que Sophie sería suya permanentemente cuando la viera jugar con su otro perro.

Ahora a veces acompaña al departamento de policía que la rescató para trabajar. Ella también ayuda a enseñar a otros sobre la crueldad animal.

Los oficiales estaban tan conmovidos por la historia del avivamiento de Sophie, que ofrecieron a cualquier persona con información relacionada con su abandono una recompensa de 5 mil dólares.

Sophone ahora disfruta de paseos en automóvil y visitas al refugio de animales para ver a sus amigos.

"Nunca más se perderá otra comida y nunca volverá a tener frío", promete Mancera. "De eso estoy seguro".

En septiembre de 2018, una pareja se enfrentó a un dilema similar cuando un perro callejero se derrumbó frente a su casa.

Beatriz Baranski Kaniak acababa de mudarse con su familia a una nueva ubicación. La construcción continuaba, por lo que sus puertas estaban abiertas.

Un día, se dieron cuenta de un perro negro tendido en su camino de entrada. Ellos explicaron:

“Aunque no sabíamos nada sobre su personalidad, salud y comportamiento social, no fue una decisión difícil. Parecía tan frágil y con una necesidad desesperada de alguien que la cuidara".

La pareja ya era padres de cuatro perros de rescate, por lo que la decisión fue fácil. Llamaron a su nueva mascota Cookie y la cuidaron con un viaje al veterinario de inmediato.

En poco tiempo, Cookie volvió a cuidarse y se convirtió en un cachorro feliz como debería haber sido desde el principio.

Y así como este perro pasó por este sufrimiento, otro canino tuvo un destino similar luego de que una mujer casi lo matara de hambre porque 'no era su perro' sino el de su exnovio.

Afortunadamente, gracias a una foto el canino se salvó. Un buen Samaritano tomó una foto de la mezcla de mastín escuálido y lo denunció al control de animales. Los oficiales llegaron rápidamente a la escena, liberaron al perro de su pesado collar de cuero y cadenas y lo llevaron rápidamente a un veterinario local.