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Astuta perra pretende no tener hogar para estafar a clientes de McDonald's y conseguir hamburguesas

Una mujer de Oklahoma City dice que atrapó a Princesa, su canina caza fortunas, en el acto de estafar a los clientes del autoservicio.

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Betsy Reyes dice que su perra Princesa se escapa por la noche y se sienta fuera de McDonald's, fingiendo ser una perrita de la calle. Y tiene evidencia para probarlo.

"Si ves a mi perra en McDonald's, deja de alimentar su gordo trasero porque no sabe comportarse y se va de la casa todo el tiempo para ir a McDonald's por la noche", escribió Reyes. "Ella ni siquiera es una perra callejera".

Reyes llamó a Princesa una “caza fortunas” que actúa como una perra de la calle para que la gente se sienta mal y la alimente con sus hamburguesas.

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La publicación de Reyes de las fotos de la perrita se volvió viral y la Princesa saltó a la fama de Internet.

Reyes decidió atrapar a su perra en el acto. Condujo a McDonald's el lunes por la noche y encontró a Princesa allí, esperando ser alimentada.

Una mujer fue vista saliendo por la ventana de su auto para darle algo de comida. Reyes publicó un video de la perra atrapada con las manos en la masa, o con las patas, mejor dicho.

Después de atrapar a Princesa estafando a un cliente de McDonald's, Reyes se detuvo en su auto y su cachorra la reconoció de inmediato. Comenzó a mover la cola y se montó feliz en el vehiculo, aunque antes fue a pedir comida a otro cliente.

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El conductista animal Corey Cohen se rio cuando escuchó sobre la mendiga.

"Esto demuestra que los perros son muy inteligentes y su comportamiento es más complejo que el simple 'estímulo/respuesta'", dijo Cohen, que reside en el noreste de Pensilvania. "Es por eso que debemos tratarlos como amigos y no como máquinas".

Y el video a continuación reafirma esto. El protagonista es un perro muy especial llamado Cabrón, quien, al llegar clientes a una gasolinera de Ciudad de México, les rasca la pierna con su pata, a manera de petición.

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Los que lo conocen se encargan de traducir su gesto, indicando que le den una moneda; el perro la toma y se dirige directamente a la ventana del escaparate, donde la deposita para el cajero. Cabrón sabe exactamente lo que estaba haciendo: está comprando un bocadillo.

Es posible que aprendiera esto por imitación, al ver que todos cambian monedas por comida, pero sin lugar a dudas, su inteligencia está fuera de rango.

Otro perrito que ha impresionado por su gran educación es Bruno, y recientemente surgió un video en las redes sociales que lo hizo famoso por la forma en que pide comida.

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Bruno ha aprendido una forma especial de solicitar alimento. Cuando llega la noche él se acerca con su compañero y fiel amigo a un restaurante. Pero no se les acerca a los comensales del establecimiento, sino que se mantiene en la puerta del negocio y hace una especie de reverencia con sus patas.

La acción del can es muy respetuosa, ya que espera pacientemente afuera a que alguno de los clientes se conmueva con su enternecedora y educada forma de pedir que lo alimenten.

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