Algunas razones inesperadas para comer en familia

Expertos han corroborado que las dietas en niños, adolescentes y adultos jóvenes mejoran cuando comparten comidas con su núcleo familiar.

Según un estudio realizado por investigadores canadienses, el hecho de que los niños y adolescentes se sienten a comer juntos en familia los lleva a tener una dieta más saludable, independientemente de que haya conversación entre el núcleo o no.

Los científicos, a través de una encuesta realizada a 2.000 familias en los Estados Unidos, concluyeron que las comidas familiares exponen a los adolescentes a más frutas y verduras.

Uno de los datos más curiosos, es que los estudios demostraron que el impacto fue más influyente en los niños. Esto representa un dato interesante, puesto que son los varones los más propensos a comer más comida chatarra que las niñas.

Estos estudios son sumamente importantes para los investigadores, debido a que las tasas de obesidad han ido en aumento, por lo que cualquier descubrimiento sobre la mejora de la ingesta en los niños y adolescentes debe ser compartido.

Kathryn Walton, candidata a doctora en nutrición de la Universidad de Guelph en Canadá, explicó que las comidas familiares frecuentes se asociaron con comer más frutas y verduras y menos comida rápida para los jóvenes de familias con alto y bajo rendimiento.

En este sentido, la nutricionista insiste en que las cenas familiares son una buena manera de fomentar una alimentación más saludable en adolescentes y adultos jóvenes.

DIFERENCIAS CULTURALES

En el Reino Unido, apenas el 30 por ciento de los británicos hacen uso habitual del comedor, pues para ellos, la mesa de la cena ahora solo se usa para ocasiones especiales.

Un dato que le parece más alarmante a los nutricionistas es que la quinta parte de los hogares del Reino Unido ni siquiera tienen una mesa para comer en unión familiar.

En contraste, en los Estados Unidos la comida familiar se mantiene como una parte importante de la cultura.

Cerca del 88 por ciento de los estadounidenses refirieron que regularmente se reúnen a compartir la cena con otros miembros de su núcleo familiar.

Sin embargo, un reto mayor se presenta en este país, debido a que a la gran mayoría (90% de los ciudadanos) prefieren la comida rápida antes de cocinar ellos mismos, por cuestión de comodidad y poca disposición de tiempo. Y esto genera un impacto nutricional negativo.

Como posible solución, Walton considera que las comidas familiares hacen que los adolescentes y adultos jóvenes a tengan dietas más saludables y dejen de comer menos comida chatarra.

Asimismo, recomienda que los niños coman cinco porciones de frutas y verduras por día.

BENEFICIOS DE LAS CENAS FAMILIARES

Las investigaciones sobre los resultados de las comidas familiares ha arrojado una serie de beneficios físicos, mentales y emocionales, entre los que se encuentran:

• Mejor rendimiento académico

• Mayor autoestima

• Mayor sentido de resiliencia.

• Menor riesgo de abuso de sustancias

• Menor riesgo de embarazo adolescente

• Menor riesgo de depresión

• Menor probabilidad de desarrollar trastornos de la alimentación

• Menores índices de obesidad

Un estudio sobre los beneficios de comer en familia arrojó que los nexos se fortalecen considerablemente, especialmente entre padres e hijos.

Así como que los adolescentes que regularmente comen con sus seres queridos tienen menos probabilidades de participar en peleas, ser promiscuos, consumir drogas, alcohol o fumar tabaco.

FELICIDAD EN LA COCINA

Demostrando que preparar los alimentos sale mejor con alegría, una abuelita llamó la atención de alrededor de 6 millones de cibernautas después de que un video de ella bailando mientras cocinaba llegara a una página de Facebook cubana.

La grabación de la señora ha logrado acumular muchos comentarios positivos, sobre todo por la sorprendente habilidad de la mujer para moverse.

Si quieres ver el video de la feliz abuelita, haz click aquí.