Increíble recuperación de perrito abusado que ni parecía un perro
Cientos de casos sobre mascotas en muy mal estado se ven al año en Estados Unidos, por lo que las clínicas veterinarias siempre cuentan con rescatistas dispuestos a ayudar a estar pobres criaturas.
Dobby, un canino de Florida, de 5 años, afortunadamente corrió con esa misma suerte en 2016, cuando su antiguo dueño se apiadó y lo llevó a un establecimiento de vacunación, donde el personal quedó impactado al ver su estado.
El perrito no tenía pelaje y estaba rojo, mientras que sus uñas estaban tan largas que se curvaban debajo de sus patas. A los trabajadores se les rompía el corazón de solo ver las condiciones de Dobby, que según la dueña, nunca había asistido al veterinario.
Para ese año, Sara Harper trabajaba como técnica veterinaria en esa clínica de vacunación de bajo costo dirigida por Ciudadanos Preocupados por el Bienestar de los Animales, y apenas vio al descuidado animal, supo que era su misión ayudar a curarlo.
“Estábamos horrorizados por su condición de malnutrición. Junto con todo su cuerpo crudo y sangriento, sus pies también lo eran, y las uñas de los pies crecieron tanto que se curvaron en sus patas”, dijo Harper a The Dodo.
Explicó que la antigua dueña había usado un tratamiento contra las pulgas todos los años que lo tuvo, lo que tal vez enfermó su piel y que no quería gastar dinero en él. “Le rogué a ella, como socorrista, que lo entregara, y ella aceptó de inmediato”, contó Harper.
Uno de los compañeros de trabajo de la técnica veterinaria permitió que ella se lo llevara a su propia clínica, para que el tratamiento del perrito se iniciara inmediatamente.
Entonces se pusieron manos a la obra: le cortaron las uñas, lo bañaron y le hicieron exámenes de sangre, mientras que el noble cachorro simplemente se quedaba tranquilo sin quejarse en ningún momento.
A los días, Dobby fue admitido por Pawsibilities Rescue, organización que continuó apoyándolo en su sanación. Allí pasó meses recibiendo baños medicados para curar su piel y apareciera nuevo pelaje, hasta que la que sería su nueva dueña por fin lo conoció.
Liz Ford había visto su foto en Facebook y había hecho trámites para adoptar otro perro llamado Wylie que también estaba en Pawsibilities Rescue. Cuando llegó por Wilie, vio a Dobby y se enamoró instantáneamente.
"No podía creer lo que veía cuando lo vi… Mientras esperaba a que Wylie se curara lo suficiente para ser adoptada, estuve al tanto del pequeño Dobby. Cuando fui a recoger a Wylie, estaba sentada en el suelo en la casa del trabajador de rescate y Dobby vino y se acurrucó en mi regazo. En ese momento supe que él vendría a vivir con nosotros”, recordó.
Actualmente, Dobby está cubierto de pelaje blanco y esponjoso, y no se parece en nada al perro que fue llevado a la clínica hace tres años. Le encanta jugar a buscar y correr alrededor de la casa con su compañero Wylie, y su nueva familia está muy orgullosa de lo lejos que ha llegado.
Y así como existen estas personas que viven para rescatar animales, un hombre se dedica a salvar a caninos de dos patas. Lo sorprendente es que el sujeto, que se dedica a la educación, contó a los medios que siente pasión al trabajar con perros de terapia.
Lo mejor es que puedes conocer toda su maravillosa historia pulsando en este enlace.