Amparo Arozamena, la mujer que dedicó su vida a la actuación y pasó sus últimos años en un asilo
¿Cómo olvidar a Amparo Arozamena, una mujer que dedicó la mayor parte de su vida al arte dramático en México y varias partes del mundo?
A finales de abril de 2009, Arozamena cerró los ojos para siempre. Tenía 92 años y muchos achaques de salud cuando un paro cardíaco le terminó de arrebatar la vida.
Amparo -quién se volvió famosa al formar parte de las cintas Almas encontradas y La vida de Pedro Infante, y por su participación en los melodramas Pobre niña rica y Duelo de pasiones- dedicó toda su vida al arte.
SUS COMIENZOS
Nacida el 24 de agosto de 1916 en Ciudad de México, debió retirarse de la actividad artística por una caída que prácticamente la inmovilizó algunos años antes de fallecer.
Siendo hija del actor Eduardo Arozamena y su tío dueño de una empresa de teatro, era de esperarse que una joven Amparo incursionaría en el mundo de la actuación. Y así fue.
A los cinco años de edad, su tío la puso al frente de varias obras de teatro y recibió su primer pago de 10 centavos por sus participaciones.
Tiempo después, el hermano de Amparo, Juan, creó una compañía de la mano de varios artistas e incluso algunos familiares (con ella incluida), adentrándose aún más al mundo del entretenimiento.
Tenía sólo 14 años cuando la compañía mexicana Hermanas Arozamena triunfó, efectuando actuaciones con coreografías y canciones mexicanas.
Ella incursionó en este mundo bailando e interpretando papeles infantiles, hasta que obtuvo un rol en La calle de los sueños (1929), una película dirigida por Jorge Diano.
Amparo Arozamena. | Imagen: Flickr
DESPEGANDO COMO UN COHETE
Curiosamente, con la compañía teatral de su hermano, Amparo recorrió todo México e incluso viajó a otros países como Cuba y España, volviéndola la primera empresa de actores mexicanos en efectuar una gira con 30 artistas durante casi una década.
Años más tarde, cuando pudo, Arozamena también fundó su propia empresa junto a Luisa y Guadalupe, sus hermanas, con quienes repitió su éxito más allá de las fronteras mexicanas.
Así fue que su carrera despegó y se volvió una de las actrices más queridas de teatro, cine y televisión, actuando junto a artistas de la talla de Cantinflas, Mauricio Garcés, Adalberto Martínez "Resortes", Guillermo Rivas, Luis Rodríguez "Palillo", Antonio Espino Mora "Clavillazo", y Fernando Soto "Mantequilla".
Amparo Arozamena. |Imagen: YouTube/Crónicas De Paco Macías
Amparo también compartió créditos con grandes actores como Jorge Negrete, Pedro Infante, los hermanos Soler e incluso Pedro Armendáriz, dándose a conocer con las cintas mexicanas "Almas encontradas", "Cuando los padres se quedan solos" (1948), "Al son del mambo" (1950), "Dos hijos desobedientes" (1958) y "Gallo corriente, gallo valiente" (1964).
No hubo año en que no la viéramos en las pantallas de nuestra sala o del cine.
"Quisiera ser hombre" (1988), "Un paso más acá" (1988), "Dos hermanos buena onda" (1993) y "Tres comunes y corrientes" (1995) fueron algunas de las últimas cintas en las que Amparo participó en el siglo pasado.
Al entrar a los 2000, vimos a la mexicana en los melodramas "Mi destino eres tú" (2000), "Locura de amor" (2000), "Amigos por siempre" (2000), "DKDA: Sueños de juventud" (1999), "El diario de Daniela" (1999), entre otras telenovelas.
Amparo Arozamena. |Imagen: YouTube/Crónicas De Paco Macías
LA VEJEZ HACE DE LAS SUYAS
En 2005, cuándo Amparo sufrió una fractura de fémur -raíz de una caída-, el mundo se detuvo para ella. Después de lesionarse, la actriz debió ser operada de la pierna derecha y debió poner en pausa sus proyectos artísticos.
Eventualmente, la edad avanzada de Amparo hizo de las suyas y ella lentamente se fue retirando de los escenarios y de las pantallas.
Ramón Barón Ortega, su esposo, empezó a sufrir de demencia y falleció a finales de 2007. Meses antes, el hijo de la actriz, Juan Antonio Serna, había muerto de un infarto al miocardio.
Tanto Ortega como la actriz estuvieron viviendo en un asilo durante algún tiempo, a pesar de que la pareja tenía el apoyo de sus familiares, nietos y bisnietos.
Luego de que su salud se deterioró aún más y tras la dolorosa muerte de su hijo, Amparo se fue a vivir con su sobrina, Marisa Garrido, donde habitó bajo el cuidado de María Eugenia Juárez, hasta su muerte en 2009.
“No era un secreto que la señora tenía tiempo delicada de salud, iba y venía del hospital constantemente, hasta que se dio este triste desenlace", dijo Juárez a Notimex en esa oportunidad.
Amparo Arozamena. |Imagen: YouTube/Lunas Auditorio
DESCANSE EN PAZ
La actriz, quién era recordada por tener una gran calidez humana, fue cremada y sus cenizas fueron depositadas en la iglesia Santo Tomás Moro, en Ciudad de México. Ahí se encuentran los restos de sus familiares más cercanos y queridos.
Setenta y cinco años de trayectoria ininterrumpida en el cine, televisión y teatro llegaron a su fin a las 5 de la tarde del 30 de abril de 2009.