Trabajadora de salud devastada porque un hombre la escupió y llamó "esparcidora de virus"

El acoso hacia los profesionales de la salud que día a día arriesgan sus vidas en la primera línea de batalla contra el coronavirus, se ha salido de control en el Reino Unido.

El pasado 15 de abril, a través de un video publicado en Youtube por el canal de ITV News, se conoció la historia de la trabajadora de cuidados Amy Hall, de 28 años de edad, quien lamentablemente fue atacada por un comprador en una tienda que la llamó “esparcidora de virus”.

Pero esto no fue lo único que tuvo que soportar la cuidadora, ya que el sujeto también trató de escupirle, como ella misma aclara en la grabación. Además, explicó que se ensañó con ella cuando la vio ataviada con su uniforme de trabajo.

Amy Hall contó que había salido entre turnos para dirigirse al establecimiento, para comprar unas flores que le regalaría a su madre. Ese día se celebraba el Día de las Madres en Waterlooville, Hampshire.

La historia ha sido publicada desde el pasado 25 de marzo. Uno de los portales que le ha dado cobertura ha sido The Scottish Sun, que especificó que la agresión ocurrió el sábado 21 de marzo.

"Fue bastante surrealista. No puedo creer que algunas personas tengan esa opinión sobre nosotros", confesó la mujer agredida en una tienda.

La cuidadora recalcó que solo están tratando de ayudar a los ancianos, que están muy ansiosos, a superar estos momentos tan difíciles y que los maltratos claramente no son bien recibidos por el personal de la salud.

No obstante, los presentes en la tienda mostraron su apoyo a la cuidadora del Verina Daly Care y la dejaron pasar hasta el frente de la fila, mientras que ella simplemente se encogió de hombros y siguió con su día.

El Director del Ministerio Público, Max Hill, dijo que los trabajadores de salud y emergencias se enfrentan a ataques diarios relacionados con el coronavirus y muchos son tosidos deliberadamente, escupidos o abusados ​​verbalmente, según reseñó el portal Mirror.

También los intolerantes se han dedicado a causar daños a los automóviles de los sanitarios y a dejar notas ofensivas en las puertas de sus casas.

En este sentido, Hill refirió que ha habido docenas de denuncias de policías, trabajadores del Servicio Nacional de Salud y otros trabajadores de primera línea que fueron tosidos deliberadamente y atacados verbalmente todos los días desde que comenzó el aislamiento preventivo.

Los delitos relacionados con el coronavirus, en los que el COVID-19 se usa para amedrentar a los trabajadores de la salud, se han convertido en una tendencia preocupante.

Sin embargo, los profesionales de la salud están tan comprometidos con ayudar en medio de la crisis desatada por la enfermedad del coronavirus, que siempre tratan de encontrar la manera de animar a sus pacientes durante la cuarentena.

El perfecto ejemplo es la idea de un médico estadounidense a quien se le ocurrió la conmovedora iniciativa de imprimir una foto sonriente de él mismo y pegarla en su traje para tratar de confortar a sus pacientes.