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Inés Ballester cuenta su historia de lucha: 'El coronavirus ha sido peor que el cáncer'

Guadalupe Campos
04 may 2020
19:54

En una entrevista para El País con Luz Sánchez-Mellado, Inés Ballester habló sobre su internación por coronavirus. Comparó la experiencia con su anterior lucha contra el cáncer y conversó sobre sus planes a futuro.

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Tres semanas. Ese fue el tiempo que Inés Ballester, de 61 años, llevó internada con una neumonía bilateral producto del COVID-19. Ahora, ya en su casa, recuperando de a poco la salud y los kilos perdidos, puede finalmente contarlo.

Inés Ballester en la presentación de "La Chica A La que No Supiste Amar", enero de 2020. | Foto: Getty Images

Inés Ballester en la presentación de "La Chica A La que No Supiste Amar", enero de 2020. | Foto: Getty Images

En su conversación por videollamada con Sánchez-Mellado, comentó algunos detalles sobre su experiencia y su estado actual. "Estoy rara", afirmó la presentadora de Telemadrid, quien se está reincorporando a actividades como el ejercicio físico, la terapia psicológica y las charlas con amigas, pero a través de Internet.

No es la primera vez que la presentadora se encuentra de frente con una enfermedad potencialmente letal: ya debió superar antes un cáncer de mama. Sin embargo, no duda en afirmar que en muchos aspectos su experiencia con el coronavirus fue peor.

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Inés Ballester en 2004. | Foto: Getty Images

Inés Ballester en 2004. | Foto: Getty Images

"Para mí el virus ha sido peor que el cáncer. Con el cáncer sabes que te puedes morir, pero no sentí dolor ni soledad", sostuvo.

No duda en decir que el COVID-19 le ha cambiado la vida mucho más profundamente que aquella otra enfermedad pasada. Por la soledad en un hospital de campaña y la incertidumbre, y también por el profundo malestar.

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"Son momentos muy duros en todos los sentidos. De dolor físico, de soledad, de depresión, de miedo", afirmó.

Relató que, emocionalmente, esos días de internación fueron un péndulo de emociones: de pensar cómo sería su funeral si no llegase a contarlo a fantasear con un gin tonic en Ibiza. Mientras tanto, se enojaba con los trabajadores de la salud, que estaban desbordados y no podían darle la cercanía y humanidad que ella tanto ansiaba.

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"Soy muy peleona, lo quiero saber todo, y esos días los sanitarios estaban desbordados", admitió. "Se han dejado la piel, se han jugado la vida, pero eso lo ves después."

Tras esa experiencia, su deseo es poder estar allí para quienes atraviesan la enfermedad en soledad. "Como se supone que soy inmune, pedí ser voluntaria para hacer compañía a personas mayores que estén solas", reveló.

Además, también le comunicó al director de Telemadrid que puede aprovechar su inmunidad actual. Comunicó que recibió varias ofertas de trabajo tras su salida del hospital.

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"Cuidaos mucho, porque sé lo mal que se pasa. No os expongáis, no vale la pena hacer el tonto", serían las palabras que dedicaría a su audiencia, de tener programa hoy.

Conversó también sobre su experiencia televisiva, su amargura frente a la forma súbita en que TVE le quitó su puesto pese a las buenas marcas de audiencia, y su lucha contra el machismo en las críticas hechas a programas de actualidad pensados para mujeres.

Puede que sus luchas contra la enfermedad la hayan llevado hasta el límite, pero Inés Ballester está de vuelta. Pero eso no le quitó el ánimo de mirar hacia adelante con optimismo y ganas de brillar.

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