Padre adoptivo soltero acoge a otro niño que se quedó sin hogar durante la pandemia
En medio de tiempos difíciles, más allá de los retos y temores también se deja ver la bondad de los corazones que actúan de manera desinteresada para ayudar a otros. Este padre adoptivo que recibió otro niño en plena cuarentena lo demuestra.
En Instagram se le conoce como “padre adoptivo”. Es Peter Mutabazi, de 37 años de edad, y tiene casi 62 mil seguidores que ven y comparten a través de ese canal los momentos entre padre e hijo de él con su primer chico adoptado, de 13 años de edad. Sin embargo, la familia crece.
Cuando transcurría la tercera semana de la cuarentena, Mutabazi recibió una llamada de una trabajadora social que le preguntaba si podía recibir a otro niño en adopción. De esta forma, el miedo tocó la puerta de este hombre.
Peter no dejaba de preguntarse qué riesgos implicaba recibir al niño sin saber de qué entorno provenía, en medio de una pandemia que azota al mundo entero. No obstante, fue la misma situación la que le hizo pensar en el destino que tendría el pequeño si él no lo acogía en su hogar.
Este padre soltero que ya vive una experiencia de adopción siguió su corazón y recibió al niño de siete años que en plena crisis no tenía adónde ir.
"Sabíamos que no tendríamos ayuda de nuestros amigos en medio de la emergencia porque todos están en cuarentena, pero también sabíamos que todo lo que él necesitaba era un hogar y una familia que lo amara", contó Mutabazi en Instagram.
"No podía imaginar adónde iría este pequeño si no interviniéramos para ayudar", confesó el hombre, cuya amabilidad salvó a un niño de quedarse sin hogar durante la crisis del coronavirus.
La experiencia ha sido muy buena para toda la familia, que ahora es de tres. En su relato, Mutabazi también destacó que su hijo mayor no tiene muchos juguetes, por lo que han tenido que acudir a la creatividad para hacer que el pequeño se divierta.
La propia historia de Peter es de gran valentía. Después de sobrevivir a un pasado abusivo, dejó su pueblo en la frontera de Uganda y se fue a vivir a Oklahoma, Estados Unidos.
En esa ciudad ha cuidado de niños sin hogar. Al darse cuenta de todo el espacio en su vivienda ofreció un lugar a quienes no tienen donde ir. Se ha hecho cargo de 12 niños sin hogar temporalmente.
Así llegó su primer hijo, Anthony, de 13 años. Después de cuidar de él durante una semana tomó la decisión de convertirse en su padre adoptivo.
La historia de Peter es apenas una entre muchos testimonios conmovedores de familias que se eligen para compartir amor y juntas salir adelante.