'Mientras hay vida, hay esperanza': hombre de 59 años vuelve a la vida tras 45 días en la UCI
Durante mes y medio la familia vivió en medio de un temor diario a recibir las peores noticias sobre su ser querido, mientras él luchaba contra el COVID-19 en la sala de cuidados intensivos.
A Miguel Ángel Asensio, de 59 años, el virus lo tomó desprevenido el pasado 13 de marzo, un día antes de ser decretado el estado de alerta en España. Un fuerte dolor de estómago y una elevación de su temperatura fueron tomados a la ligera, y solo le dieron una indicación de un analgésico.
Apenas cinco días después, con una franca dificultad respiratoria, Asensio fue ingresado al centro médico Virgen de la Concha con un cuadro de neumonía severa, que ameritó ser conectado a un ventilador en la unidad de cuidados intensivos.
"Cada día estábamos pendientes de la llamada del hospital por la mañana. Si las noticias eran buenas, todavía. Cuando eran negativas, no podíamos ni comer ni dormir. Cuando te llamaban, estabas con el corazón en un puño", dijo Iván Asensio.
En esos primeros días aún no había comenzado el horror que provocaría el coronavirus, y en la medida que las noticias fueron siendo más oscuras con un galopante ascenso en las cifras de fallecidos, la familia luchaba para no permitir que el pesimismo los invadiera.
Material para prueba de hisopado. | Foto: Pixabay
Sin embargo, la condición de Miguel Ángel se complicaba día a día. A pesar de ser un hombre fuerte, saludable, con buenos hábitos alimenticios y sin condiciones preexistentes, su salud decaía y los médicos tomaron la decisión de practicarle una traqueotomía.
La mejoría de Asensio fue muy significativa y por momentos surgía la esperanza de que había logrado sobrevivir al coronavirus. Pero una bacteria intrahospitalaria tenía planes diferentes, al invadir sus débiles pulmones y producir un retroceso en su condición de salud.
Médicos y enfermeras trabajan con pacientes en la UCI en el Hospital General Vila Penteado en Sao Paulo, Brasil, el 5 de mayo de 2020. | Foto: Getty Images
Los médicos no dejaron de hacer su mayor esfuerzo por atacar esta nueva complicación del paciente, mientras la familia se mantenía ausente de la sala hospitalaria, debido a las restricciones impuesta a raíz de ser decretado el estado de alerta.
"Las enfermeras nos recomendaron hablar por teléfono, hacer videoconferencias, algo fundamental para subir el ánimo del enfermo", cuenta el hijo de Miguel Ángel.
Finalmente la mejoría comenzó y una luz de esperanza iluminó los días del personal sanitario que atendía a Asensio y a su familia.
Mascarilla para el rostro. | Foto: Pexels
Luego de 45 días en cuidados intensivos, Miguel Ángel pudo salir en medio de aplausos de todo el personal, luego de haber dado negativo en el test de COVID-19.
"Estaré eternamente agradecido a todo el personal sanitario del hospital", expresó Asensio, resaltando las palabras de los médicos: "Mientras hay vida, hay esperanza".
Actualmente se encuentra en una habitación en el área de neumología, donde debe recuperar sus fuerzas y algunos de los 20 kilos de peso que perdió en su paso por la UCI, para finalmente regresar a su hogar, donde lo espera con ansias toda su familia, quienes por suerte han dado negativos a coronavirus.