Zuria Vega tuvo un colapso nervioso en el parto de su hija Lúa, por la muerte de su papá

No es común escuchar a las mujeres, especialmente a las famosas, hablar del lado complejo de su maternidad y parto. Pero Zuria se sinceró con la fundadora de Alma Madre, hablando de sus dificultades.

A través de su cuenta en Instagram, la educadora perinatal Wadi Doula comparte lo que ha llamado ‘Historias de Nacimiento’, y en esta oportunidad conversó en forma amena con Zuria Vega sobre los nacimientos de sus hijos, Lúa y Luka.

Para la actriz Zuria Vega, cada uno de los nacimientos de sus hijos fueron experiencias muy diferentes, y no necesariamente fáciles, aunque en definitiva las disfrutó mucho.

Su primera hija fue Lúa, quien vino al mundo en enero de 2017. La ilusión de la actriz era vivir un parto completamente natural, por lo que se preparó para ello, sin embargo, al llegar al séptimo mes, falleció su padre y emocionalmente quedó muy afectada.

Aunque sabía que la pequeña tenía el cordón umbilical alrededor de su cuello, aún sabía que era factible llevar a cabo un parto, ya que se encontraba en buena posición en las fechas cercanas al nacimiento. Pero todo se complicó cuando la bebé empezó a moverse.

No fue suficiente recurrir a la acupuntura, yoga y demás. La niña no volvía a la posición ideal, y tras 18 horas de trabajo de parto, debió someterse a una operación cesárea para que naciera su hija. Vega tuvo un colapso nervioso al caer en cuanta de que su hija nunca conocería a su abuelo.

En mayo de 2019 nacería Luka, el segundo hijo en común entre Zuria y su esposo Alberto Guerra, y esta vez la experiencia fue un poco más parecida a lo que soñaba esta madre.

Todo fluyó en forma perfecta a lo largo del embarazo, pero luego de iniciarse las contracciones Luka comenzó a moverse, perdiendo así su acomodo perfecto. La diferencia es que en esta oportunidad, la acupuntura y ciertos ejercicios lograron el efecto deseado. El bebé volvió a la posición idónea para el parto.

"La verdad es que cuando nace, que eso es brutal, eso no lo pude vivir con Lúa, como cuando nace tu bebé todo se te olvida, todo se fue", explica Vega, sobre lo que sintió al nacer Luka.

A modo de resumen, aunque ninguno de los nacimientos de sus hijos fue como ella hubiera querido, sin ayuda, Zuria afirma que disfrutó plenamente ambos procesos, y en especial que su esposo Alberto estuviera a su lado todo el tiempo.