La explicación científica de por qué la nieve se pone negra al quemarla con un mechero
Tras la inesperada nevada que blanqueó las calles de Madrid, surgieron insólitas teorías que afirmaban que era solo un engaño y la nieve era de plástico. Pero todo tiene una explicación racional.
Los negacionistas han existido desde siempre. Sin embargo, las redes sociales les han dado un protagonismo único gracias al poder de difusión que tiene cualquier noticia que hable de conspiraciones.
El año pasado, fueron demasiados los que difundieron todo tipo de bulos o noticias falsas que sostenían que el covid-19 no era real y que formaba parte de algún tipo de conspiración.
Los estragos de la tormenta Filomena en Madrid, enero 2021. | Foto: Getty Images
Lamentablemente, muchos de quienes creyeron en esto sufrieron en carne propia la ferocidad del coronavirus, e intentaron enviar mensajes retractándose desde la cama de un hospital.
Pero en esta oportunidad fue la increíble nevada que cayó sobre la ciudad de Madrid debido al temporal Filomena lo que activó a los negacionistas.
Hacía cincuenta años que no ocurría algo así en la capital española, por lo que para muchos fue una experiencia única.
Un video compartido por una mujer dio inicio a la teoría que negaba que lo que caía sobre la ciudad era nieve. En su grabación, ella se quejaba y sostenía que todos eran nuevamente víctimas de un engaño masivo, mientras intentaba probar que la nevada era de plástico.
Su teoría nacía de su iniciativa de tomar un puñado de la nieve que caía en su balcón e intentar derretirla con un mechero. En lugar de eso, la nieve se ennegreció y desprendió un fuerte olor a plástico quemado. A partir de ahí, fueron varios los que repitieron el “experimento” de la usuaria de las redes, con similar resultado.
Esta teoría conspirativa nunca ofreció una explicación coherente sobre por qué alguien querría verter toneladas de plástico sobre la ciudad.
LA VERDADERA EXPLICACIÓN
Algunos científicos y especialistas se han ocupado en dar una explicación racional y lógica del fenómeno que están presenciando. La doctora en Física y Meteorología, Mar Gómez, publicó a través de Twitter:
“Cuando aplicamos la llama a la nieve no se derrite, sino que se sublima, pasa directamente a estado gaseoso”, explica Mar, según recoge Maldita.es.
“El color negro es porque el combustible del mechero no termina de quemarse por completo y deja restos en la nieve; de ahí el olor a plástico quemado”, aclara la doctora.
Otros profesionales, como el biólogo Álvaro Bayón y David Pareja, un realizador de cine, reforzaron la explicación dada por la doctora Mar. Inclusive se demostró una forma más lógica de derretir esa nieve para convertirla en agua y no en vapor, utilizando un soplete.
Esperemos que con la llegada de la primavera y su cálida temperatura, se derrita eventualmente toda la nevada caída y con ella, el bulo.