Victoria Kent: la historia de la primera mujer que llegó a ser directora general de prisiones en España
Nacida en el seno de una familia irlandesa, la malagueña se convirtió en una de las primeras féminas en ocupar un cargo tan importante en el país.
La historia de Victoria Kent es una de esas que se alzan en un mundo machista para dejar claro que la mujer puede desenvolverse en el área que le asignen. Kent fue la primera directora general de prisiones en España, al ocupar el cargo en 1931.
Fue una comprometida defensora de los derechos de los reclusos, aunque al final terminó siendo obligada a dimitir de su ejercicio profesional.
Fotografía de Victoria Kent (1891-1987), abogada y política republicana española. | Foto: Getty Images
¿QUIÉN FUE VICTORIA KENT?
A lo largo de los años, han sido miles las mujeres que se han enfrentado al mundo para defender sus propios derechos, hacerle frente a la discriminación y velar por los derechos humanos.
Victoria Kent es una de esas tantas que figuran en la lista de mujeres que han roto paradigmas y se han convertido en las primeras féminas en desempeñar una labor importante que, anteriormente, solo se asignaba al bando masculino.
Kent provenía de una familia de Irlanda y Gibraltar. Nació el 6 de marzo de 1891 en Málaga. Desde chica ya asomaba en ella indicios de independencia y fuerza de voluntad al ser criada en un ambiente liberal.
Incluso, dejó su hogar para trasladarse sola a la ciudad de Madrid a cursar el bachillerato y empezar la carrera de Derecho en la Universidad Central, según Vanity Fair.
Detalle de la cárcel del juzgado de Plaza de Castilla en Madrid. | Foto: Getty Images
Muy pronto comenzó a relacionarse con personas de los círculos políticos de la capital española. Finalmente obtuvo el título de Licenciada en Derecho en el año 1924.
De acuerdo con los registros reseñados por la revista, Kent se convirtió en la primera dama en registrarse en el colegio de abogados de la capital y la segunda en toda el país. Más tarde se convertiría también en la primera mujer en defender ante un tribunal a uno de los acusados de la Rebelión de Jaca de 1931.
Ese año también se impuso en el cargo de Diputada de las Cortes Republicanas. Pero el título que la convirtió en una mujer simbólica fue la dirección general de prisiones de toda España.
Kent fue una mujer muy humanitaria que nunca dejó atrás su lucha por los reclusos, pero su mismo carácter la convirtió en un blanco de críticas en una sociedad machista.
La malagueña se encargó de eliminar los grilletes con los que en aquel entonces se ataba a los reos. También creó un cuerpo femenino de funcionarias en las prisiones y tuvo un papel principal en las mejoras de la comida que se ofrecía a los reclusos y la libertad de culto.
Victoria Kent flanqueada por el Presidente de la República, Niceto Alcalá Zamora y Álvaro de Albornoz, en Madrid en 1931. | Foto: Getty Images
Todas estas acciones la llevaron a ser catalogada como débil para ostentar el cargo. Además, durante el tiempo en la dirección general también ocurrieron varios acontecimientos que terminaron poniendo en duda su capacidad para ejercer un cargo tan algo e importante.
Entre ellos, está la fuga de varios reclusos. Esto no fue nada apropiado para la imagen de la mujer malagueña. Sus adversarios terminaron logrando su dimisión el 4 de junio de 1932. No llegó a ser reelegida el año siguiente. Más tarde, su intento de recuperarse en las elecciones de 1936 se vio frustrado por la Guerra Civil.
Llegó a ser nombrada Primera Secretaria de la embajada de España en París. Desde entonces, y debido a la derrota del gobierno frente a Alemania, tuvo que vivir ocultándose de las autoridades. Logró escapar de España y vivió en el exilio hasta el final de sus días el 26 de septiembre de 1987.
Otra gran historia de vida que resalta el empoderamiento femenino es la de Karima Benyaich, la embajadora de Marruecos en España.
Ella fue la primera mujer en ostentar ese cargo debido a la confianza del rey Mohamed VI por su larga e impecable trayectoria profesional.