logo
página principalHistorias Inspiradoras
Un conserje limpiando el piso. | Foto: flickr.com/Daquella manera (Public Domain)
Un conserje limpiando el piso. | Foto: flickr.com/Daquella manera (Public Domain)

Colegas se sorprenden cuando la jefa le propone matrimonio al conserje del que todos se burlaron - Historia del día

A veces, la gente hace las cosas más locas en nombre del amor. Cuando Peter hacía todo lo posible por ganarse el afecto de Karen, ella inicialmente rechazaba sus avances. Poco después, se dio cuenta de que él era mucho más de lo que parecía ser.

Publicidad

Karen fue criada para seguir un camino específico en la vida y, en su mayor parte, lo había logrado. Terminó la carrera de derecho en un tiempo récord y se hizo cargo del bufete de abogados de sus padres a los 32 años.

Su familia siempre quería lo mejor para ella y la animaba a encontrar un socio con un buen estatus. “No queremos que te engañe un estafador loco. Quédate con tu gente y siempre estarás a salvo”, le decía su padre, David.

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Getty Images

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Getty Images

A pesar de haber salido con hombres importantes en el mundo empresarial, Karen había tenido poca suerte en el romance. Había salido con socios de bufetes de abogados, políticos y empresarios exitosos de la competencia.

Cada relación que había tenido había sido de naturaleza fugaz. Cuando pensaba que había encontrado a alguien especial, se daba cuenta de que no tenían nada en común, aparte de sus antecedentes financieros.

Publicidad

Los hombres esperaban que ella quedara impresionada con ellos, a pesar de que era tan trabajadora y exitosa como cualquiera de ellos.

“¿Por qué ninguno de estos hombres puede lograr enamorarme? Siento que salgo con la misma persona una y otra vez. Tal vez solo soy una romántica empedernida”, le dijo Karen a su amiga Lisa.

“El corazón quiere lo que el corazón quiere. Tal vez el hombre adecuado para ti venga del lugar que menos esperas”, respondió Lisa. Llegó un momento en que Karen estuvo a punto de casarse con un millonario tecnológico.

Desafortunadamente, descubrió que él la había estado engañando. En su oficina, habían comenzado a circular rumores de que el limpiador, Peter, era el admirador secreto de Karen.

Ella empezó a recordar que Peter siempre le mantenía la puerta abierta. También había estado encontrando hermosas flores en su escritorio por la mañana.

“¡El sucio Peter se ha enamorado de la jefa! ¡Cuidado, no queremos que ella apeste como tú!”, solían decir los empleados del bufete, burlándose de él.

Publicidad
Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Getty Images

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Getty Images

Años atrás, él soñaba ser como ellos. Estaba estudiando en la facultad de derecho, pero tuvo que abandonar sus estudios para cuidar a su padre enfermo.

“Escucha, Peter. Sé que estás tratando de ser dulce. Pero esto es inapropiado. Soy tu jefa. Además, si los empleados hombres te ven coqueteando conmigo, podrían pensar que pueden hacer lo mismo. Sin ánimos de ofender, obviamente”, Karen le dijo a Peter.

Las palabras de su jefa le habían dolido. Él siempre la pasaba mal en el bufete.

A pesar de tener una edad similar, no tenía los mismos antecedentes ni las mismas oportunidades que sus superiores. Había tomado ese trabajo en el bufete de abogados como una forma de recordar sus oportunidades pasadas.

Publicidad

Por desesperación y enamoramiento por Karen, Peter tramó un plan secreto. Más tarde esa noche, ella estaba cenando con un exitoso empresario llamado Chris. Los dos se estaban llevando bien y tenían rato conversando.

Ambos permitieron que sus conductores salieran temprano, pues se irían a casa de forma independiente.

Cuando estaban saliendo del restaurante, un par de malhechores los atacaron en la calle.

“¡Dennos todo el dinero ahora!”, gritaron los asaltantes.

Chris inmediatamente corrió hacia su auto para escapar, dejando a Karen sola con los bandidos. En ese momento, Peter salió corriendo de un pub cercano y ahuyentó a los malhechores.

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Getty Images

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Getty Images

Publicidad

“Dios mío, muchas gracias. Estaba muy asustada”, le dijo Karen mientras lo abrazaba.

El hombre le sugirió a su jefa que anotara su número para que ella pudiera avisarle cuando llegara a casa sana y salva. La mujer estuvo de acuerdo, pero cuando Peter sacó su teléfono, Karen se dio cuenta.

Uno de los malhechores estaba en el fondo de pantalla del teléfono de Peter, y los dos eran claramente amigos.

“¿Qué está pasando? ¿Por qué ese tipo está en tu teléfono?”, preguntó ella.

“Puedo explicarlo. Era una broma. No iban a lastimarte ni nada. Solo quería que me vieras como un héroe. Lo siento mucho”, dijo el conserje.

“¿Qué tipo de broma tan estúpida es esa, Peter? Estás despedido. ¡Lárgate!”, le dijo Karen antes de comenzar a correr hacia su auto. Mientras las lágrimas rodaban por su rostro, ella escuchó una voz detrás de ella gritar: “¡CUIDADO!”.

Sintió una mano agarrar su brazo y tirar de ella hacia atrás con fuerza. Mientras caía al suelo, vio un automóvil atropellando a Peter.

Publicidad

La mujer se arrastró hacia el lugar del accidente y se dio cuenta de que él estaba debajo del auto que lo había arrollado. Inmediatamente, llamó a una ambulancia y fue trasladado a un hospital.

Ella también condujo hasta el centro médico y se quedó esperando que el hombre saliera de cirugía. Unas horas más tarde, un doctor salió para informarle a Karen sobre la situación Peter.

“El paciente está en estado crítico. Va a recuperarse, pero pasará algún tiempo antes de que pueda volver a caminar correctamente”, dijo el médico.

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Getty Images

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Getty Images

“Está bien. Por cierto, yo cubriré todos los gastos de su operación. Sé lo costoso que puede ser”, aseguró Karen. Luego fue a visitar a Peter en su habitación en el hospital.

Publicidad

Cuando el hombre recuperó el conocimiento y vio a Karen, le preguntó rápidamente: “¿Estás herida?”.

“Estoy bien, gracias. Me salvaste la vida, Peter”, respondió ella.

“Supongo que la broma queda perdonada ahora”, bromeó él.

Karen se rio antes de responder: “Escucha, sé que te dije que estabas despedido, pero me gustaría hacerte una oferta. He escuchado algunos rumores sobre ti en la oficina. Dicen que abandonaste la facultad de derecho”.

“Me gustaría darte la oportunidad de que regreses y termines tus estudios. Me salvaste la vida y es lo menos que puedo hacer por ti”, dijo Karen.

Peter aceptó la oferta, pero todavía tenía que recuperarse del accidente. Durante ese tiempo, Karen lo visitó diariamente en el hospital hasta que le dieron de alta.

Luego lo llevó a la oficina en silla de ruedas, donde fue recibido como un héroe. Era la primera vez que le demostraban aprecio de esa manera desde que había comenzado a trabajar en la firma.

Sin embargo, para su confusión y la de todos sus colegas, su jefa, Karen, se arrodilló frente a él. Nadie lo podía creer.

Publicidad

“Sé que esto es una locura, pero no me importa. Nadie había hecho por mí algo como lo que tú hiciste, y para ser honesta, incluso me impresionó tu broma con esos malhechores”.

“Nadie había hecho eso por mí tampoco. Mi amiga me dijo una vez que podría encontrar el amor en lugares aleatorios con las personas que menos nos podíamos imaginar”.

“Y no podría haber tenido más razón. Peter, un conserje. Futuro abogado. Mi superhéroe. ¿Te casarías conmigo?”, le preguntó Karen.

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Getty Images

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Getty Images

“¡Claro que sí! Y gracias por no hacer que me arrodillara”, bromeó él.

Meses después, Karen y Peter se casaron. Los dos formaron una familia y tuvieron dos hijos juntos. Cuatro años más tarde, él terminó su carrera de derecho y comenzó a trabajar en la misma firma donde solía ser un conserje.

Publicidad

¿Qué podemos aprender de esta historia?

  • Hay más en una persona que su dinero: Karen juzgaba a Peter por su situación económica cuando, en realidad, tenían más en común de lo que creía.
  • Algunas personas harán el máximo sacrificio por ti: Karen decidió esperar a que llegara a su vida el hombre adecuado, y era la elección correcta. Algunas personas te dejarán para que te las arregles tu cuenta, otras arriesgarán sus vidas por ti.

Comparte esta historia con tus amigos. Podría alegrarles el día e inspirarlos.

Este relato está inspirado en la vida cotidiana de nuestros lectores y ha sido escrito por un redactor profesional. Cualquier parecido con nombres o ubicaciones reales es pura coincidencia. Todas las imágenes mostradas son exclusivamente de carácter ilustrativo. Comparte tu historia con nosotros, podría cambiar la vida de alguien. Si deseas compartir tu historia, envíala a info@amomama.com.

Publicidad
Publicidad
Publicaciones similares