Hallan a madre colgada tras pelea con novio junto a hija de 3 años que lloraba
Tras discutir con su pareja, Marek Goralczyk, quien se disponía a irse de farra con sus amigos, Agnieszka Giza fue hallada sin vida junto a su pequeña hija llorando.
Según reporta el diario británico Daily Mail, Agnieszka Giza estaba emocionada por ir a un concierto junto a su novio, el empresario Marek Goralczyk, pero tras una discusión, la mujer fue hallada ahorcada en su hogar de Runcom, en Cheshire, Inglaterra, el pasado mes de febrero.
Marek se rehusó a llevar a Agnieszka al concierto, dejándola con su hija de 3 años. El hombre insistió en que ninguno de sus amigos llevaría a su pareja. Luego de esta disputa, la pareja intercambió desagradables mensajes por WhatsApp, y Giza acusó a Goralczyk de pasar la noche con otra mujer.
Procedió a darle un ultimátum, tras lo cual el celular de Goralczyk se quedó sin batería. El hombre pasó la noche en casa de uno de sus amigos, y jamás leyó el último mensaje de Agnieszka. Marek declaró que la relación comenzó en el 2015, luego de conocerse en Wigan.
El triste hecho aconteció cuando Marek asistió a un concierto de rap de un músico polaco. Declaró que Giza quería acompañarlo, pero que él no quiso ser el único en el lugar con su novia, así que la dejó sola en casa con su hija.
Giza concluyó que el hombre le estaba siendo infiel, y e envió una serie de mensajes en WhatsApp. Marek dijo a las autoridades que bebió unas seis Red Bull y se fue a dormir a casa de un amigo, quien lo despertó unas dos horas después, informándole sobre la muerte de Giza.
Marek dijo también estar estupefacto por la muerte. Volvió a casa y halló a la policía, pero no podía creer que Agnieszka estuviese muerta. La consideraba una mujer fuerte y una madre devota, y no tenía sentido.
David Wood, Sargento de la Policía de Cheshire, dijo en la audiencia de Warrington que dos obreros llegaron por la mañana a reparar una puerta del patio.
Pasaron 5 a 10 minutos tocando el timbre, sin resultados, y escucharon el llanto de la niña, lo cual les causó preocupación. Uno de ellos ayudó al otro a franquear la verja trasera y entrar a la casa.
Llamaron a la mujer por nombre, pero sólo escucharon a la niña, que gritaba que papá había vuelto. Al tocar la puerta de la alcoba y no recibir respuesta, lo pensaron dos veces, llamando a un conocido mutuo, quien abrió la puerta por la fuerza. Entonces encontraron el cadáver.
En la conversación de WhatsApp, la mujer parecía enojada y muy celosa. Alegaba que Marek no era muy fanático de ese artista en particular, y que aún así, fue al concierto, sin ella y con sus amigos. Parecía implicar que ella estaba ansiosa por ir al evento.
Exámenes de toxicología revelaron que estaba casi tres veces por encima del límite legal, y por lo tanto, profundamente ebria en el momento de su muerte, con un contenido de alcohol sanguíneo de unos 197 mg de alcohol por 100 ml de sangre.
Janet Napier, auxiliar forense, declaró la muerte un accidente, manifestando que duda seriamente que Agnieszka estuviese realmente intentando morir.