Familia afligida enterró a su perro muerto, pero tras 14 horas aparece la mascota viva en su puerta

El animal no respiraba, no tenía pulso y su corazón no latía. Aún así, se desenterró.

De acuerdo a lo relatado por Newsner, esta tragedia que ocurrió dejó a una familia entera devastada.

Lo que pasó les hizo preguntarse qué habría ocurrido si ese coche que atropelló a su mascota hubiese pasado un segundo más tarde, o si ese día de octubre de 1990 el perrito no hubiera estado en su camino, en ese preciso momento.

Una familia vio cuando su perro, un Jack Russell llamado Mugsy, fue atropellado por un coche que transitaba por la vía en la que este caminaba. No pudieron salvar la vida del perro y lamentablemente falleció en los brazos de su dueño, Glenn, o por lo menos así pareció.

No obstante, a la mañana siguiente, pasó algo completamente asombroso e inesperado, algo que la familia llamó un ‘milagro’ y que nunca pensó podría ocurrir.

El dueño de Mugsy todavía recuerda cada detalle de ese tenebroso día. Cuando su mamá, Viola, estaba en el trabajo, su papá, Glenn, había estado en el jardín jugando con sus otros hijos.

De repente, notó que Mugsy se había desaparecido de su lado y escuchó un terrible ruido proveniente de la calle.

Siendo entrevistado en el antiguo show de Oprah Winfrey, Glenn dijo lo siguiente:

“Él estaba en la entrada de autos. Lo escuché chillar y corrí a la vía. Ahí lo encontré gateando, estaba lleno de sangre”.

Luego de que sucedió el trágico accidente, no fueron capaces de salvar la vida de pequeño perrito. Él ya no respiraba, había perdido el pulso y su corazón no latía. El pobre había muerto en los brazos de su papá.

Por supuesto que el señor no quería que sus hijos vieran que su mascota había muerto tan trágicamente, así que les pidió que entrarán a la casa. Luego, se dirigió a la parte trasera de la vivienda y cavó un hoyo en donde finalmente enterró a su amigo del alma.

“Yo estaba devastado. Lo enterré rápido, ni le dije nada a los niños. No me daba el alma para decirles nada sino como hasta las siete de la noche. Mugsy estaba muerto”, relató el dueño.

Cuando su esposa Viola llegó a casa en la noche, y los niños supieron qué había sucedido con su amigo peludo, hicieron una pequeña ceremonia para darle el adiós definitivo a su mascotita.

La hija leyó un verso de la Biblia y luego la familia le dijo adiós a Mugsy. Pero las 5:30 de la mañana del día siguiente algo increíble sucedió.

“Me desperté porque la puerta sonaba. Me levanté, la abrí y subí las persianas”, contó Glenn en el programa.

Glenn entonces vio algo que sus ojos no podían creer; un milagro. Resulta que el perro estaba sentado frente a la puerta de la casa moviendo la cola esperando que lo dejaran entrar.

Viola estaba convencida de que Glenn había enterrado a otro perro que no era el de ellos.

Entonces, asustados, se dirigieron al sitio en donde Glenn había enterrado su amigo para echar un vistazo. No obstante, la tierra claramente había sido movida y en el lugar no había rastro de ningún perro o de algún cadáver.

En el show de Oprah Winfrey, la familia reveló:

“El veterinario dijo que probablemente, después de seis horas, el perrito se había desenterrado. Su corazón y todo lo demás había estado tan lento antes que no era obvio que estaba vivo. No había señales de que estaba vivo”, contó Viola.

“Así que probablemente solamente durmió hasta las 5:30 de la mañana y luego se desenterró”, agregó.

Resulta que Mugsy estaba bien. Fue un verdadero milagro y no podemos imaginar lo feliz que la familia entera estaba debido al acontecimiento.