Joven paciente atacó a 9 enfermeras y vigilante tras ser "provocada" por santuario a niño difunto
La insensible respuesta de su enfermero de apoyo, llevó a esta adolescente a pensar que ella también moriría en el hospital Alder Hey.
La joven de 15 años, identificada como R, es autista, y además padece un trastorno de estrés postraumático por haber vivido en una zona de guerra en Irak durante varios años.
A su regreso de Irak, fue recluida en el hospital de niños Alder Hey en Liverpool, mientras el ayuntamiento trataba de encontrarle un centro de cuidado a largo plazo. Pero lamentablemente eso no ocurrió, por lo que lleva varios meses en ese lugar.
El sr. Michael Mylonas QC, de Alder Hey Children's NHS Foundation Trust, dijo que hasta cinco ambulancias aéreas llegan al hospital todos los días, lo que hace que R este "extremadamente angustiada, probablemente a consecuencia de haber vivido en una zona de guerra".
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En sus recorridos diarios, la chica encontró el santuario del niño Alfie en los terrenos del hospital y su enfermero de apoyo le explicó que Alfie era un niño que había venido al hospital y había muerto allí.
La chica entró en crisis al pensar que ella también moriría en el Alder Hey, como le ocurrió al niño Alfie, que murió en el hospital por una rara enfermedad cerebral degenerativa en abril, lo que provocó su ataque al personal del hospital.
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Nueve enfermeras y un guardia de seguridad resultaron heridos durante el incidente, lo que trajo como consecuencia que seis miembros del personal se ausentaran por enfermedad y otro dimitiera.
Los detalles de la difícil situación de la chica se revelaron en una audiencia en el Tribunal Superior, donde el juez Hayden criticó al consejo de Liverpool por no haber sido capaz de conseguirle un mejor lugar para quedarse.
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Y agregó que el hecho de no encontrar una colocación adecuada a la niña, le estaba causando daño y su estadía prolongada además perjudicaba a niños enfermos que no pueden ingresar a recibir tratamiento en el hospital.
Afirmo que R tenía "daños físicos y emocionales realmente profundos" y que "el estado, de quien tenía derecho a esperar atención y apoyo, le ha causado un daño significativo".
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Mark Twomey del ayuntamiento de Liverpool, le dijo al juez que habían encontrado una ubicación alternativa para el adolescente, pero que no estaría lista hasta dentro de dos semanas, ya que requiere capacitación del personal que la cuidará y otras modificaciones para hacerlo apto para su condición.
Alfie murió de una extraña enfermedad degenerativa, siendo finalmente desconectado de un respirador en abril de 2018. Hubo una prolongada batalla legal antes de esto, que atrajo la atención de miles de personas, incluyendo al Papa Francisco.
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