Padre conoce a su bebé recién nacida tres horas antes de morir

El profesor de educación física Brett Kinloch, de 31 años, murió este mes después de una larga batalla con un tumor cerebral. Falleció el mismo día que su esposa Nicola dio a luz a su tercera hija, Ariya.

Un maestro de Linslade fue diagnosticado con un tumor cerebral de glioblastoma de grado 4, poco después del nacimiento de su primera hija. El hombre se suponía viviría solo durante 12 años, pero demostró que los médicos estaban equivocados.

A pesar de su corto pronóstico de vida, logró tener una segunda hija en ese tiempo. Pero no solo eso, el 11 de febrero, su esposa dio a luz a su tercera hija, a quien conoció miligrosamente.

LLEGÓ JUSTO A TIEMPO

Nicola dio a luz a su última hija en el Hospital Luton & Dunstable. Pero 50 minutos después, ella, su madre Jill y la bebé recién nacida se apresuraron a la M1 del Hospital Milton Keynes, para ver a Brett. Tres hora después el hombre murió.

"Suena horrible, pero podría haber sido mucho peor, podría haber nacido 24 horas después. Me consuela mucho el hecho de que él la conociera ", dijo Nicola dijo.

La madre describió la primera y última reunión de padre e hija declarando: "La puse encima de él y ella recibió un abrazo de Brett, podía escuchar lo que estaba pasando y sabía que estábamos allí, siempre estaré agradecida por eso ".

Nicola y sus hijas Freya, 4, Ella, 18 meses y Ariya han recibido apoyo las 24 horas del día de su familia, amigos y la comunidad en la que viven. La mujer no pudo más que sentir gratitud por toda la ayuda que recibió.

"Nunca puedo agradecer lo suficiente al NHS; el médico llamado Tim, que mantuvo vivo a Brett, a los paramédicos que lo llevaron allí ... había enfermeras de todas las áreas del hospital que solo querían hacer todo lo posible, las parteras Hayley y Laura en el Hospital L&D trabajaron incansablemente y con compasión para que me pusiera en camino lo antes posible, no había nadie en el NHS que no hiciera nada por ayudarnos ", compartió Nicola.

Brett fue un profesor de educación física de Northampton, también fue jefe del departamento en Cedars Upper School. Él y Nicola se conocieron cuando ambos comenzaron su carrera docente en la Academia Milton Keynes en 2010.

TERRIBLE DESCUBRIMIENTO

Brett sobrevivió a su diagnóstico con la ayuda de un tratamiento familiar autofinanciado en el extranjero. Sin embargo, justo antes de Navidad, con su esposa esperando a su tercer hijo, se le informó que el tumor había vuelto a crecer en un área del cerebro que era inoperable. Su condición se deterioró gravemente desde ese punto en adelante.

Hablando sobre su marido, Nicola dijo: "Brett nunca ha tenido excusas y él vivió la vida plenamente. Todavía trabajaba tres semanas antes de morir; Quería mantener a su familia ". Dijo además que él había amado la vida y no dejó que la enfermedad lo detuviera.

La familia se fue de vacaciones al extranjero e incluso logró llevar a los niños a Disneylandia. Compartiendo acerca de cómo los niños se vieron afectados al perder a su padre, ella dijo:

"Freya está absolutamente devastada. Perdimos a mi abuela el año pasado, por lo que tiene cierta comprensión de lo que es perder a alguien. Ella solía llamarlo su "príncipe guapo de superhéroes" y hacían todo juntos. Fue un buen padre ", agregó Nicola. Una recaudación de fondos en línea para la familia Kinloch está disponible en GoFundMe.

En otra historia en la que los niños sin quedan sin su figura paterna, es la de los chicos Smith, tres hermanos que quedaron huérfanos luego que el papá muriera meses después que la madre de los niños.