3 remedios a base de ajo que podrían ayudarte a tratar un problema tan íntimo como el hongo vaginal
¿Sabías que existen 3 remedios caseros a base de ajo para eliminar los hongos de tu vagina? Aquí te contamos la forma de prepararlos y cuál es la forma correcta de aplicarlo.
El ajo es un vegetal con muchos beneficios, vitaminas y minerales para el cuerpo humano. Sin embargo, también puede ser utilizado por las mujeres de una forma tópica para combatir la proliferación excesiva de hongos vaginales, aliviar las molestias y recuperar el equilibrio perdido.
Según el portal Mejor Con Salud, los hongos vaginales son un problema frecuente que agobia a muchas mujeres, los cuales causan molestias o picazón en ellas. Aunque existen diversos jabones para la zona íntima, los expertos recomiendan tratarlos de la forma más naturalmente posible.
Este tipo de hongos pueden ser generados por cambios hormonales, exceso de calor o humedad, diabetes, sobrepeso, uso de ropa interior sintética, relaciones sin protección y llevar una dieta rica en azúcares y refinados.
El ajo es un potente fungicida y combate la irritación, picor, inflamación y secreción de flujo que el hongo trae consigo.
Gracias al contenido en alicina que este vegetal posee, lo hace un fuerte remedio contra una gran variedad de hongos, virus y bacterias.
El remedio casero más sencillo para realizar con este vegetal es la inserción de ajo. Consiste en introducirse en la vagina medio diente de ajo recién cortado y dejar que actúe durante la noche. A medida del tiempo, el ajo irá soltando la alicina para eliminar el hongo.
El segundo es un poco más elaborado y consiste en machacar 2 o 3 dientes de ajo, envolverlos en una gasa esterilizada e introducirlo en la vagina a modo de tampón. Para no causar una posible irritación, debe dejarse máximo 4 horas.
La última forma para preparar el remedio, se basa en el aceite de ajo. Esta es la opción más cómoda para la mujer que lo usa y se basa comprar cápsulas de aceite de ajo, abrir una de ellas y colocar el líquido en una toalla higiénica. El calor y la humedad, facilitarán la acción de la alicina.