Doctor sugiere a mamá abandonar bebé con síndrome de Down. Tras 33 años ella demuestra su error

Durante décadas, los médicos recomendaron a mujeres embarazadas abortar a niños especiales porque no podrían tener vidas normales.

Según reporta So Share This, el síndrome de Down es una condición marcada por mucha discriminación social hacia sus afectados, hasta el punto que durante muchos años, los médicos sugerían el aborto a toda madre embarazada de un niño Down, porque no tendrían calidad de vida.

Islandia encabezó titulares del mundo entero el año pasado luego de haber eliminado el síndrome de Down dentro de sus fronteras. Esto es una admisión implícita de que muchos niños fueron deliberadamente abortados.

Hace 30 años en Cambridge, Inglaterra, Mirka Anderson, oriunda de Polonia, quedó embarazada de una pequeña niña que bautizó Emma. Mirka no se hizo los exámenes inusuales. Se enteró de su condición de Down luego del parto, llevándose una gran sorpresa en el Hospital Rosie.

"La consultora nos dijo a mí y a mi marido que ella tenía síndrome de Down", cuenta Mirka a Cambridge News. "Ella dijo que no teníamos que llevarla con nosotros a casa, porque no haría nada de todas formas".

Horrorizada por la actitud insensible y ligera de la doctora, Mirka se llevó a Emma a casa. No iba a abandonarla. A través de la vida de Emma, Mirka siempre intentó asegurarse de que recibiera la misma educación que los demás niños.

Emma creció de maravilla, se ganó un Certificado General de Educación Secundaria en artes, demostrando a sus detractores que podía ser exitosa. "Cuando era más joven, nos dijeron que no podría participar en grupos de juegos normales con otros niños", explicó Mirka a un diario local.

"Presioné para que entrara al grupo normal, y al final, la aceptaron", cuenta. "Vengo de la Polonia comunista, estamos acostumbrados a obviar la burocracia. En toda su educación, siempre pedí que le dieran una oportunidad".

Finalmente, en 2005, la persistencia de Mirka dio resultados. Emma entró a la Universidad Regional Cambridge, y un empleado de la institución ingresó al arte de la joven en una competencia de la galería de arte Tate Modern.

Y ganó. Emma fue una de dos estudiantes cuyo arte ha llegado a la prestigiosa galería.

"Fue muy dañino como madre que acababa de dar a luz que te dijeran que tu bebé es un inútil pedazo de carne", dijo Mirka. "Pero mírenla ahora. Es una niña increíble".

Luego de escuchar soibre el progreso y éxito de Emma, un portavoz del Hospital Rosie dijo "estamos extremadamente sorprendidos y preocupados al escuchar estos comentarios, y nos gustaría, a pesar de que van más de 33 años, invitar a la Sra. Anderson a contactarnos y discutir su experiencia".

"Por supuesto, estamos felices del éxito de Emma con su arte en el museo Tate Modern", agregó. Por supuesto, el viejo adagio de "muy poco, muy tarde" aplica para esta débil disculpa. A pesar de todo, ¡buen trabajo, Emma!