¿Cuánto vale la salud? Mujer recibirá 160.000 euros por pierna que perdió por mala praxis
En Alicante una mujer fue atendida durante siete días en un tratamiento que debía ser hecho en horas tempranas.
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Con una condena de 161.993 euros la Conselleria de Sanidad de la Generalitat valenciana tuvo que indemnizar a una mujer por quitarle su pierna debido a un diagnóstico erróneo.
El Defensor de la paciente presentó como recurso que se le había realizado una ‘mala praxis’ por error.
DOLOR REPENTINO QUE TERMINÓ EN AMPUTACIÓN
La paciente había acudido al médico por un dolor en la planta del pie, el cual también lo tenía adormecido, y el diagnóstico fue ‘parestesias inespecíficas’.
Posteriormente luego de no mejorar las molestias en su pie, volvió a ir al centro de salud, en donde el diagnóstico fue ‘fascitis plantar’, según El Español.
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Motivado a esto la mujer tuvo que llevar un vendaje durante seis días, a pesar de esto, las molestias eran intensas y no paraban, por lo que regresó, le retiraron el vendaje y fue el mismo diagnóstico anterior el emitido por los médicos.
Doctora sosteniendo pierna / Imagen tomada de: Shutterstock
Luego de detectarle ‘isquemia subaguda en el pie izquierdo’, fue trasladada al Hospital General de Alicante, y fue ahí en donde le amputaron su pierna izquierda.
AUTORIDADES DETECTAN ERROR DE DIAGNÓSTICO
Las autoridades concluyeron en que fue evidente el error del diagnóstico, y que los síntomas jamás cesaron por la larga demora ante una patología que debería haber sido tratada tempranamente.
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La mala praxis fue obviamente detectada pues el problema de sus pies agravó cuando los médicos le aplicaron un vendaje que no era necesario para tratar su patología.
UNA CONDENA JUSTA ANTE OPERACIONES NEGLIGENTES
Su indemnización es de 161.993 euros que adicionalmente deberá incluir los intereses desde el momento en que se le hizo el reclamo
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En un hecho negligente similar un hombre fallece de cáncer por un diagnóstico erróneo, el hombre de 33 años trabajaba en alta mar y le habían realizado estudios después de desarrollar sinusitis y alta congestión nasal.
Cuando estuvo convencido de su padecimiento los médicos lo trataron con esteroides y antibióticos, para tiempo después perder la visión de un ojo y le detectaron rabdomiosarcoma alveolar.
El error médico llegó cuando en lugar de colocarle una solución salina, le inyectaron una sustancia con formaldehído, usada para la preservación de cuerpos.
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