1 de noviembre: celebración del día de Todos los Santos
El día de Todos los Santos es una solemnidad cristiana que se celebra el 1 de noviembre para las iglesias católicas de rito latino, y el primer domingo de Pentecostés en la Iglesia ortodoxa.
Es una de las fiestas más importante del año, tanto por su significado religioso como por sus costumbres, tradiciones y ritos muy arraigados que se practican desde hace siglos.
La persecución del imperio romano hacia los cristianos a principios del siglo IV produjo tantos mártires, que la Iglesia instauró un día común para ellos, fuesen o no conocidos: el día de Todos los Santos.
Todos los Santos, pintado por Fra Angélico.| Fuente: Wikipedia
La conmemoración fue variando de fecha hasta que Gregorio III en el siglo VIII fijó el día 1 de Noviembre. Posteriormente Gregorio IV extendió la festividad a toda la Iglesia.
Desde ese momento en todos los países católicos se celebran fiestas y rituales en honor a todos Los Santos.
La Iglesia celebra esta fiesta por todos aquellos difuntos que, habiendo superado el purgatorio, se han santificado totalmente, han obtenido la visión beatífica y gozan de la vida eterna en la presencia de Dios.
El día de Todos los Santos se celebra el 1 de noviembre.| Fuente: Shutterstock
Este festejo no es solo en honor a los beatos o santos que están en la lista de los canonizados y por los que la iglesia celebra en un día especial del año; sino también por todos los que no están canonizados pero viven ya en la presencia de Dios.
Por su significado religioso y profano existen muchas costumbres y ritos, incluso en las distintas regiones y ciudades de un mismo país.
En España los días 1 y 2 acostumbran visitar las tumbas de amigos, familiares y seres queridos. Limpian las tumbas, les colocan flores y se rezan por ellos.
Polonia celebra este día con mucha devoción.| Fuente: Shutterstock
Durante estos días los escenarios españoles se llenan con los personajes de “Don Juan Tenorio” obra escrita por Zorrilla. Una de las escenas más conocida de esta obra escrita en verso, se desarrolla en un cementerio y con apariciones de muertos.
Estas fiestas también están íntimamente relacionadas con la gastronomía, pues otra de las costumbres es comer dulces.
No pueden faltar los buñuelos de viento: masa frita en forma de bola, rellena de chocolate o crema.
Es una de las fiestas más importante del año.|Fuente: Shutterstock
La costumbre dice que por cada buñuelo de viento que se coma, se salva un alma del purgatorio. Los huesos de santo son dulces típicos que consisten en una masa de mazapán cuya forma se asemeja a un dedo.
Por otra parte, están los “panellets”, masa dulce hecha con azúcar, almendra molida, huevo y ralladura de limón recubierta con clara de huevo y piñones.
En la región de Canarias, las familias se reúnen y cuentan anécdotas e historias de familiares y amigos, comiendo frutos secos y bebiendo anís, vino dulce o ron con miel.
Los países católicos se celebran fiestas en honor a Todos los Santos.| Fuente: Shutterstock
Mientras que en Cádiz se celebra el día de Los muertos de carnaval. Acostumbran a ir de compras a los mercados donde los conejos, cerdos y gallinas a la venta están disfrazados.
En Zamora las cofradías de las Ánimas organizan procesiones por los cementerios llevando velas encendidas para mostrar el camino a las ánimas, mientras rezan el rosario.
En España los días 1 y 2 acostumbran visitar las tumbas de familiares.|Fuente: Shutterstock
Los habitantes de Tajueco festejan el Ritual de las Ánimas, una procesión encabezada por un sacerdote.
Forman dos grupos, casados y solteros que corean las estrofas del cántico de las animas. Al finalizar tocan la campanilla y reparten pastelillos y vino. Durante toda la procesión las campanas del pueblo suenan.
Se encienden velas para mostrar el camino a las ánimas.| Fuente: Shutterstock
En Murcia organizan mercadillos callejeros donde se venden flores y productos típicos como el arrope, calabazate, pan de higo, carne de membrillo o frutos secos.
De esta manera las personas honran a todos los Santos, alegrando el descanso de los difuntos y celebrando con dulces bocados para que descansen en paz, iluminando con fervor y generosidad a las ánimas benditas en su camino.