Perra abandonada fue encontrada en tal estado que rompió el corazón de los veterinarios
Una perra abandonada fue encontrada tan desnutrida que no podía caminar ni pararse.
La maltratada Staffordshire Bull Terrier -llamada Ayma por los veterinarios que la cuidaban-, fue descubierta por un civil que caminaba por North Shields, Tyne and Wear.
La RSPCA incluso se metió a investigar el incidente de mediados de octubre de 2018, en el que la pobre tenía un peso tan por debajo de lo normal, que todos sus huesos se marcaban a través de la piel.
La inspectora de RSPCA, Cathy Maddison, dijo que no hay experiencia en el trabajo de rescate de animales que la prepare para encontrarse con casos tan atroces como estos.
Ella dijo: "No sé cómo sigue viva y lo que es aún más desgarrador es lo encantadora y amigable que es, a pesar de lo que ha atravesado”.
Al ser rescatada, le dieron nutrición a base de líquidos y mucha comida.
Desafortunadamente, los temores de Cathy de que no sobreviviera la noche fueron confirmados cuando los veterinarios tomaron la difícil decisión de dormir a Ayma después de que su terrible condición empeorara.
La pequeña no tenía microchip, pero se creyó que tenía unos cuatro años y estaba cubierta de pulgas.
El hombre que encontró a Ayma le dijo a Cathy que se dirigía a una entrevista de trabajo cuando se encontró con la pobre cachorra.
La envolvió en una toalla para mantenerla caliente y se contactó con la RSPCA para obtener ayuda urgente, pero al final, su enfermedad estaba demasiado avanzada como para que los veterinarios la salvaran.
PERRO QUE HACE LLORAR A SU VETERINARIA
Un trabajador de mantenimiento en Georgia (EEUU) vio algo que hizo que su corazón cayera. No tenía que ver con el trabajo, sino con un ser de cuatro patas reducido a piel y huesos.
El hombre sabía que tenía que hacer algo por este Pitbull gris, pero cuando se puso en contacto con las autoridades le dijeron que no podía sacarlo de su casa, porque eso sería considerado un robo.
Tenía que encontrar otra forma de ayudar al perro hambriento. Contactó con la unidad de control de animales, que dejó dos avisos en la puerta del propietario.
Una mañana, el hombre notó que el perro enflaquecido había sido colocado afuera en una jaula cerrada con llave: una señal de que el dueño estaba renunciando a él.
El empleado de mantenimiento entonces llevó a Mikey al Grayson Animal Hospital en el condado de Gwinnett y alertó a la policía.
Cuando llegó al hospital, el hombre les advirtió que estaba trayendo un perro severamente desnutrido, pero aún así el personal quedó sorprendido y conmovido.
"Cuando vino aquí, yo lloraba, estaba llorando, no lo creía", dijo entre lágrimas Cinnamon Koch, una de las trabajadoras de rescate. "Él salvó la vida de este perro".
"Este es el peor abuso que he visto", dijo Koch. "Es tan dulce y amoroso que todo lo que quiere hacer es besarte".
Seguro en manos afectuosas, el perro fue llamado "Mikey" en honor al hombre que lo había salvado.
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