Poderoso consejo de una mujer después de que el perro sufriera un golpe de calor

Nuestros amigos peludos adoran el aire libre, sobre todo en verano, pero ese sol abrasador puede causar daños graves.

Pocas personas saben que los perros no pueden sudar como los humanos. De acuerdo con la Pet Health Network, los caninos tienen un número limitado de glándulas sudoríparas que se concentran principalmente en sus almohadillas.

Esto significa que la forma principal en que los cachorros se calman es jadeando.

También pueden descargar algo de calor a través de un proceso llamado vasodilatación, que implica la expansión minúscula de los vasos sanguíneos cerca de la superficie de la piel, explicó Liftable.

Pero en un día de 90 grados, eso no es suficiente para mantener a un perro fresco y cómodo. Recientemente, una usuaria de Facebook preocupado llamado Jess Williams se encontró con este problema.

Williams estaba, literalmente, corriendo en ese momento. De acuerdo con su publicación en las redes sociales, ella había salido a correr bajo un clima particularmente sofocante durante el largo fin de semana del Día de los Caídos.

"Cuando faltaba una milla y media para llegar, encontré a una joven corriendo con su perro", explicó Williams. Es apropiado señalar que hacer ejercicio en climas cálidos puede hacer que el intercambio de calor sea aún más desafiante para un canino.

Efectivamente, Williams observó preocupada que este chucho en miniatura en particular estaba colapsado en el césped, en el medio de la reserva forestal.

"Obviamente, sufría de un golpe de calor", señaló Williams en su publicación.

Agregó que el dulce cachorro "no podía levantarse, y jadeaba más fuerte de lo que jamás había visto un perro jadear".

Al notar que el animal ni siquiera podía tragar una pequeña cantidad de agua, Williams y varios transeúntes se pusieron en acción.

Llevaron a la mascota enferma a la entrada de la reserva forestal y al mismo tiempo alertaron a la oficina del alguacil local, que inmediatamente despachó a un oficial con una bolsa de hielo.

Williams señaló en su post que nunca es inteligente enfriar a un perro demasiado rápido, por lo que ella y sus compañeros de rescate trabajaron diligentemente con lo que tenían.

Esto implicó frotar al pequeño perro con hielo para ayudar a reducir la temperatura de su cuerpo, lo que, según Williams, "tomó unos buenos 30 minutos".

Al darse cuenta de que el cachorro todavía estaba en una condición extremadamente debilitada, Williams aconsejó al propietario trasladarlo directamente al veterinario para que le administrara líquidos por vía intravenosa y reemplazo de electrolitos.

La buena samaritana decidió compartir su historia, como una forma de educar a otros dueños de mascotas sobre los peligros muy reales de la insolación canina.

Según la veterinaria Karen Becker, incluso los perros muy aptos pueden sucumbir a temperaturas moderadamente altas en cuestión de minutos.

Ella y Williams señalan que las consecuencias catastróficas pueden incluir colapso, convulsiones, insuficiencia orgánica, paro cardíaco e incluso la muerte.

Williams decidió compartir su historia de advertencia para que otros perros se salvaran de esta tragedia perfectamente evitable.

Este verano, ingrese a su mascota a un lugar fresco antes de comenzar a notar signos de advertencia temprana como jadeo excesivo, babeo, ojos vidriosos o debilidad, y siempre tenga a mano un suministro de agua limpia y fresca.