"Doctor milagroso" español Pedro Cavadas revela íntimo dolor en "El Hormiguero"
Pasó a la historia como el responsable del primer trasplante de cara en España.
Pedro Cavadas, famoso en el mundo de la medicina como el 'doctor milagro' por sus operaciones de altísimo nivel, abandonó una vida de lujos tras la muerte de su hermano.
También, sin esperar recibir nada a cambio, visitó Kenia y decidió ayudar a los más necesitados.
Este novedoso cirujano plástico pasó de tener tres Porsches a transportarse en bicicleta. Está divorciado y tiene dos hijas adoptadas en China, Ruolan, de 18 años y Xiaodan, de 14.
UN MÉDICO DE EXCELENCIA
Pasó a la historia como el responsable del primer trasplante de cara en España. Además, sus operaciones marcan hitos en las publicaciones sobre la medicina. Se dedica a la reconstrucción microquirúrgica desde 1994.
Realiza aproximadamente 1.800 cirugías anuales junto a su equipo de 3 cirujanos plásticos utilizando los tratamientos más novedosos para dar soluciones a pacientes considerados como inoperables o que han quedado con secuelas muy difícilmente reparables.
Aunque no suele publicitarse en televisión, tampoco es reacio a aparecer en los medios, pero tiende a sentirse incómodo cuando recuerda la vida de lujo que llevaba en el pasado.
Él acudió recientemente a una entrevista con 'El hormiguero' para revelar el motivo que lo llevó a cambiar y contar algunos momentos dolorosos que ha vivido.
SUS RIQUEZAS NO LO HACÍAN FELIZ
Su vida cambió debido a la muerte de su hermano y a un viaje que realizó a Kenia. Fue a partir de aquel momento que decidió despojarse de sus lujos y dedicarse a ayudar a los demás sin esperar nada a cambio.
En alguna ocasión dijo ser "un pobre diablo". "Siempre fui así, pero me di cuenta y por lo menos ahora he tenido la valentía de quitarme un montón de lastres”, señaló.
En otra entrevista había señalado que “querer tener y tener genera una situación de infelicidad continua hasta que te das cuenta. No soy yo la Virgen María, pero creo en una distribución razonable de la riqueza".
UNA NUEVA VIDA
Cavadas dijo que se redescubrió en África y actualmente trabaja allí y en su natal Valencia, pero suele pasar más tiempo en Kenia, y de vez en cuando se da unas escapadas a Tanzania. Allí practica el tiro con arco, una de sus grandes aficiones junto con la caza con arco.
Este médico, además de ser un hombre dedicado a la ciencia, leyendo constantemente literatura especializada para poder estar al día en cirugía reconstructiva, también dedica la otra parte de su tiempo a la ayuda humanitaria y a sus hijas.
"Ellas siempre dicen que su papá es el más listo de todos. Pasan conmigo consulta muchas veces y, sí, han entrado cientos de veces en quirófano. Están muy acostumbradas", contó en otra entrevista hace algunos años.
UNO DE SUS TRABAJOS RECIENTES
El doctor continúa encargándose de casos difíciles. El pasado domingo 13 de enero, el cirujano le reimplantó a un niño dos de sus dedos que habían sido aplastados en un accidente al quedar atrapado en un escalón móvil de una tracción de la feria navideña de Alicante.
Los dedos del pequeño habían quedado casi seccionados, por lo que Cavadas, junto a su equipo médico, tuvo que reconstruir varias venas y tendones afectados por el accidente.
Afortunadamente, la intervención quirúrgica salió correctamente.
UN GOLPE MUY DURO
Sobre la persona a quien le hizo el primer trasplante de cara, llegó a establecer un vínculo muy estrecho con ese paciente por ser alguien de gran calidad humana.
Compartió que aquel caso resultó "muy doloroso porque el paciente murió y nos dio una lección de vida y muerte a todos, y me hizo muchísimo daño". Puedes conocer más detalles aquí.
“Cuando murió... te mueres con él. Fue un golpe durísimo", aseveró. Sin embargo, reconoció que "la vida es así y hay complicaciones que no hay forma de solucionar ni de prever. Cuando eso pasa, la vida es una pequeña lluvia de hostias".