¿Me equivoco por no informar a mis futuros suegros sobre mis antecedentes?
Me casaré con el hombre de mis sueños, pero sus padres me dejaron claro que nunca sería lo bastante buena. Se burlaban de mi carrera, me recordaban que no encajaba en sus estándares y sonreían con cada insulto. Me quedé callada... hasta la noche en que descubrieron quién soy en realidad.
